La esperanza es lo último que se pierde y la Confederación Empresarial Regional de Comercio de Castilla y León (Conferco) tiene puestas todas sus expectativas en la próxima campaña de Navidad. Esta entidad confía en que la estabilización de la inflación permita a los castellanos y leoneses contar con un mayor presupuesto para gastar en compras y que se animen a salir a las calles y encargar sus regalos del amigo invisible, Papá Noel y de los Reyes Magos en el pequeño comercio de sus localidades.
«Navidad es la mejor época del año para casi todos y aún más para las tiendas especializadas, como jugueterías o perfumerías. En general, trabajamos todos porque, en navidades, quien más y quien menos da o recibe un regalo». Con estas palabras el presidente de Conferco, Adolfo Sainz, subrayó la importancia de la campaña que comenzará en breve.
«Hay un factor que nos favorece y es que la inflación está más controlada y los precios no han subido tanto», indicó Sainz. Explicó que al mantenerse el coste de la luz o el combustible, se espera desde el sector que «la gente tenga una mayor capacidad de compra» que en las pasadas navidades. Aunque no cuentan con un estudio o cifras de cuánto esperan que se incrementen estas ventas al ser una entidad pequeña.
Asimismo, remarcó la importancia de las luces que decoran las calles de todas las localidades. Explicó que animan a salir a los castellanos y leoneses y eso implica que los espacios públicos estén más animados. A eso se suma que los comerciantes decoran también sus escaparates y entradas a los comercios. Se expone lo mejor que tiene cada uno y se muestra en un ambiente navideño para animar a las compras. «Los pocos comercios que quedamos, los que sobrevivimos, intentamos dar lo mejor de nosotros mismos», apuntó.
No obstante, indicó que la situación es «muy difícil» para el sector». Recordó que un informe del Consejo Económico y Social de Castilla y León (CES) subraya que uno de cada cuatro comercios ha cerrado en los últimos diez años. De hecho, esta semana la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) ha cifrado en más de 5.000 la pérdida de comercios en España a finales de año, de los que 900 habrán bajado la persiana en Castilla y León, lo que equivale a una media de 75 comercios cerrados al mes en la Comunidad. Y la entidad advertía de que esta crisis afecta «de manera aún más dramática» a las localidades de menos de 50.000 habitantes, pues la pérdida de comercios se puede llegar a duplicar con respecto a la de las grandes ciudades.
Sainz aseveró que le encanta su trabajo y le da pena que se pierdan estos negocios, que no solo crean puestos de trabajo, sino que permiten dar vida a las calles. Y es que, como ciudadano, apuntó que es una lástima ver locales cerrados por todos lados. Preguntó si los políticos quieren «ciudades oscuras, tristes y sin negocios particulares».
De cercanía
Sainz animó a los ciudadanos a acercarse al pequeño comercio para hacer sus compras. Resaltó que son muchas las ventajas que ofrecen frente a otro tipo de establecimientos, como por ejemplo, la cercanía. No solo es una cuestión de espacio, de que están en el barrio o a pocos minutos de las casas, sino que también se vincula con el trato. El comerciante puede aconsejar sobre un producto y se hace responsable si hay algún problema con él. Esta experiencia no es posible con una compra online, que tampoco permite charlar y establecer un vínculo con otras personas. El presidente de Conferco cree que ésta es la mayor ventaja.
Reconoció que los pequeños comercios deben estar en internet, pero subrayó que ahí tienen perdida la batalla porque no cuentan con recursos como para dedicar el tiempo y el esfuerzo para estar bien posicionados en los buscadores o en las redes sociales.
El panorama «muy negro» entorno al Black Friday
«El panorama es muy negro porque al final vemos que las grandes superficies y las grandes plataformas de comercio electrónico son las que se llevan el gato al agua». Así de tajante fue el presidente de Conferco que remarcó que debido a la fuerza de las grandes superficies y del correo electrónico se ha implantado esta campaña en España. Subrayó que al pequeño comercio ni le viene bien ni le gusta porque «no es serio, aunque no nos quede otra que sumarnos».
Lamentó que lo que comenzó como un viernes en el que se ofrecían rebajas en los precios haya ido creciendo a una semana y ahora es más de un mes de ofertas. Y esta situación está fuera del alcance de los pequeños comercios.
El representante de estos negocios en Castilla y León insistió en que «no es serio» descuentos de un 70 por ciento o más porque afirmó que las cosas tienen su valor y, por ejemplo, una chaqueta no puede pasar de 80 a 30 euros. Aseveró que «se falta el respeto» al comprador porque en algún momento se está engañando al cliente.
En cambio, indicó que el pequeño comerciante hace un descuento de verdad, por mínimo que sea, que está vinculado a reducir su beneficio. Y por ello, se queda en entre un 15 o un 30 por ciento de rebaja como mucho. Sainz defendió que las rebajas de invierno y las de verano son las que defiende el sector por ser las adecuada para reducir el stock.