CEOE Ávila ha denunciado la «sangría» de autónomos que sufre la provincia desde hace años y que, a cierre de 2024, deja a Ávila como líder nacional en pérdida de afiliados al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA), con 280 menos el pasado ejercicio. Por ello, la organización empresarial reivindica de nuevo medidas que posibiliten el mantenimiento y el crecimiento de la actividad de los autónomos, certidumbre normativa y estabilidad política y económica.

 El presidente de CEOE Ávila, Diego Díez, ha lamentado la pérdida de trabajadores autónomos en la provincia abulense, y ha augurado dificultades para este colectivo en 2025, debido a la incertidumbre generada por la situación política y económica. En este sentido, ha insistido en reclamar «certidumbre normativa y una contención de los costes laborales, que acumulan nuevas subidas en 2025».

Las subidas de costes laborales, ha recordado Díez, alcanzan el 18,1% desde 2019. Así, ha recalcado, este periodo alcista es demasiado prolongado para los autónomos y micropymes, que necesitan un alivio de las cargas laborales, impositivas y burocráticas.

Y el anuncio de la imposición por parte del Gobierno de un nuevo aumento del SMI, hasta los 1.184 euros, «supone un quebradero de cabeza más para muchos autónomos, que podrían ver limitada su capacidad de contratación». Según los cálculos de Cepyme, el incremento del coste por trabajador sería de unos 80 euros mensuales, con lo que el crecimiento acumulado del SMI desde 2016 sería del 80,7%.

Reducción de la jornada laboral. Diego Díez explica que «la reducción de la jornada por ley constituye una nueva subida de los costes laborales que se suma a las del SMI y las cotizaciones sociales". Afectará al 75% del mercado laboral, excepto a las grandes empresas, que ya se sitúan en 37,2 horas. «Los altos costes laborales, la baja productividad, los menores recursos organizativos y la menor presencia de convenios de empresa hacen más vulnerables a las pequeñas y medianas empresas y también a los autónomos», ha advertido el presidente de CEOE Ávila.

En este sentido, CEOE Ávila considera que la medida, que podría adoptarse sin consenso en el Diálogo Social y con la oposición de los empresarios, aumentará la conflictividad y la incertidumbre.

Así, apunta que en actividades inmobiliarias, hostelería, agrario, comercio y actividades profesionales, los trabajadores que hacen jornadas superiores a las 37,5 horas semanales son el 85% del total. Yresalta que hay empresas que por su propia naturaleza no han podido reducir su jornada, de modo que el 7,9% de los asalariados trabaja más de 39,5 horas, principalmente concentradas en las ramas de información y telecomunicaciones, transporte y almacenamiento, comercio, hostelería e industrias extractivas.

«Queremos dejar claro que las organizaciones empresariales defendemos la reducción de la

jornada ajustada a las necesidades de cada sector a través de la negociación colectiva, en la que se tiene en cuenta, entre otros elementos, la productividad», ha explicado Díez.

A su vez, precisa que «en sectores donde la productividad está directamente relacionada con el tiempo de trabajo, una reducción impuesta generará desajustes organizativos y un mayor incremento de los costes laborales, resultando en una disminución de la productividad». Y finaliza diciendo que «desde 2019 la productividad por ocupado ha disminuido de forma significativa frente a su crecimiento en el conjunto de la UE, lo que se une a que España presenta niveles de productividad bajos en comparación con nuestros socios europeos».