Cumpliendo con una tradición de siglos, la de que los fieles de la diócesis recibieran al nuevo obispo al pisar el primer pueblo de la diócesis de Ávila desde su lugar de procedencia, este miércoles Jesús Rico, obispo electo que el próximo sábado será ordenado y tomará posesión de la Iglesia de Ávila, llegó a Aldeavieja procedente de Roma, donde hasta su elección ejercía como rector del Pontificio Colegio Español en esta ciudad.
También a Aldeavieja, procedente desde Madrid, había llegado en este acto lleno de simbolismo y tradición en diciembre de 2018 su antecesor en el cargo, José María Gil Tamayo, y lo mismo hizo quince años atrás Jesús García Burillo, actual administrador apostólico de la diócesis de Ávila que este miércoles fue el encargado de dar la bienvenida al obispo electo.
El recibimiento tuvo lugar junto a la iglesia parroquial de San Sebastián, donde le esperaban varias decenas de fieles, autoridades civiles, parte de la corporación municipal y también el párroco de Aldeavieja, Fernando González, quien recordó que en todas las eucaristías desde el pasado 29 de mayo, cuando la Santa Sede anunció el nombramiento de Jesús Rico como obispo de Ávila, se ha orado «por él y para que el Señor le conceda un corazón como el del Buen Pastor, que sabe ir con el rebaño, animándolo a caminar y yendo a por los que se alejan de él».
El futuro obispo llega a tierras abulenses - Foto: Isabel GarcíaLas primeras palabras que tras su llegada a esta diócesis pronunció quien este sábado será ordenado obispo de Ávila, fueron de «agradecimiento» teniendo en cuenta, dijo, que desde su nombramiento «lo único que he tenido han sido alabanzas». Mostró en esta breve intervención el futuro prelado de Ávila su sentido del humor recordando una copla que recitaba su abuela sobre el santo al que está dedicada la iglesia parroquial de Aldeavieja y que habla sobre la desnudez con la que siempre se representa al mismo. «Glorioso San Sebastián, si en este invierno tan crudo te sacan así desnudo, en verano qué será», dijo Jesús Rico sacando una sonrisa a los feligreses.
Apuntó el futuro obispo de Ávila su principal objetivo al frente de esta diócesis que no es otro que «ser, a imagen del Buen Pastor, signo de unidad y de comunión, animando a caminar juntos como comunidad que comparte carismas y ministerios y se siente llamada a transmitir la dicha del Evangelio». También aseguró de desea que la suya sea «una Iglesia abierta a todos, especialmente a los débiles y pobres de cualquier tipo», haciendo suyas unas palabras de la novela 'Diario de un cura rural' que dicen «mi diócesis de Ávila no es ni mejor ni peor que las demás, pero es la mía y es la que tengo que querer».
Aprovechó además el obispo electo para pedir a los feligreses de Ávila su «oración, colaboración y compañía para, juntos, recorrer este camino que el Señor nos traza y que el Papa me ha pedido».
El futuro obispo llega a tierras abulensesTambién cumpliendo con la tradición, el futuro obispo se trasladó a continuación a la ermita de Nuestra Señora del Cubillo donde se encomendó a la Virgen y pidió su protección.
Este acto simbólico tiene lugar apenas tres días antes de que la Catedral de El Salvador acoja este sábado una multitudinaria ordenación episcopal y posterior toma de posesión del nuevo obispo que contará con la presencia de unos 40 cardenales y obispos, encabezados por el abulense Ricardo Blázquez, que fue profesor de Jesús Rico en la Pontificia de Salamanca y que, por elección de éste, será el encargado de su ordenación.
Se espera que a la ordenación del nuevo obispo de Ávila que dará comienzo en la seo abulense a las 11,00 horas asistan un millar de personas teniendo en cuenta que la cifra de invitados confirmados supera ya las 200 personas.