El porcentaje de mujeres que estudian y trabajan en el sector de ciencias, tecnología, ingeniería o matemáticas, las llamadas STEM, sigue siendo pequeño. Y para despertar en las niñas y las adolescentes el interés y el amor por ciencia se desarrollan proyectos en las aulas. Uno de ellos es Aquae STEM. Se trata de un proyecto de la empresa Aquona que, a través de retos relacionados con el medio ambiente, el agua y el desarrollo sostenible, anima a los escolares a introducirse en estas materias. Los juegos son para todos en el aula, pero se incorpora a estas actividades la visita de mujeres con perfiles STEM de esta empresa para que las alumnas tengan referentes femeninos. 

Esta compañía, responsable de la gestión del agua en más de 60 municipios de Castilla y León, ha vuelto este año a poner en marcha este proyecto con el firme objetivo de despertar y promover las vocaciones científicas y tecnológicas de las alumnas de Primaria. 
A través de la Fundación Aquae, las aulas se convierten en espacios en los que resolver desafíos. De hecho, más de 200 alumnos de centros de Zamora, Palencia y León participan en este programa de Aquona. Es más, el alumnado del CRA Cerecedo se llevó el curso pasado el reconocimiento a la solución más popular.

Referentes

Los webinars son algunas de las actividades que ofrece Aquae STEM y que permiten a las alumnas conocer de forma virtual a mujeres relacionadas con las ciencias. Este fue el caso del encuentro con ValPat, es decir, Valeria y Patricia, una joven de 16 años apasionada por la tecnología y una ingeniera de comunicaciones que comparten su amor por la programación y la robótica. 

También, como complemento a todas estas actividades, trabajadoras de estos ámbitos de Aquona han presentado en las aulas cómo es su trabajo. Es el caso de la jefa de la ETAP de Palencia, Laura Hidalgo, y de la responsable de plantas de tratamiento de agua en la zona oeste de Aquona, Belén Gómez. De esta forma, las alumnas han contado con referente femeninos desde una perspectiva de proximidad. 

La directora de Desarrollo Sostenible y Acción Social de Aquona, Laura de Vega, ha explicado que el propósito de Aquae STEM radica en «fomentar estas vocaciones entre las niñas», pero también remarca que se trata de «implicar a su entorno más cercano para generar motivación y confianza, de manera que las niñas sean conscientes de que pueden ser lo que ellas quieran». Por ello, De Vega remarca que se trata de un programa «inclusivo» que hace partícipes en las sesiones a sus compañeros de clase,  profesores y familiares. 

Diez años

Otro proyecto educativo disponible para los colegios es Aquaología, que cumple su décimo aniversario llegando a más de 22.600 alumnos de Educación Primaria. Es un proyecto de formación que puso en marcha Aquona con el objetivo de que los niños aprendieran, por un lado, cómo es el ciclo urbano del agua, y también que hicieran un uso responsable de los recursos naturales. 

Para ello, se han desarrollado un sinfín de talleres que van a llegar este año a Zamora, Benavente, Ponferrada, Palencia, Simancas y Arroyo de la Encomienda, entre otras localidades. De esta forma, también estos municipios son lugares en los que se promueven acciones más sostenibles.

Pero, ¿cómo llegar a la infancia para que sean 'influencers' en sus hogares y adquieran esos buenos hábitos de cara al futuro? Aqualogía ha ido evolucionando con el paso del tiempo, no solo en su contenido, sino que ha ido incorporando herramientas digitales, como el aula virtual. Esta permitió mantener el programa durante la pandemia de covid-19. Además, para celebrar este décimo aniversario, ha renovado su imagen y ha incorporado nuevos materiales, como las cajas 'Aquakit'. Son actividades prácticas para ir más allá de la teoría. Estas cajas estarán en las aulas a modo piloto para los talleres de este año.

«Nuestra vocación es que Aqualogía sea un programa vivo y que nos ayude a sensibilizar a las generaciones más jóvenes sobre los grandes desafíos actuales, por ello, hemos incorporado contenidos y experimentos vinculados a los retos que plantea el cambio climático o los graves problemas que generan las toallitas desechadas por el inodoro en los sistemas de saneamiento y depuración», asegura la directora de Desarrollo Sostenible y Acción Social de Aquona, Laura de Vega. 

Además, apunta que Aqualogía tiene «un poder transformador para generar comunidades más sostenibles a través de la concienciación, pero al mismo tiempo ayuda a tejer alianzas que nos permiten mejorar la calidad de vida de las personas». Y es que hace ya un par de años que Aquona colabora con Cruz Roja para la dinamización de los talleres en las aulas. Es una forma de cerrar el círculo que une la acción social con la sensibilización.