Cada abulense consume de media al día 126 litros de agua, según datos facilitados por el Ayuntamiento de Ávila a partir de Aqualia, la empresa que gestiona en la ciudad el servicio de abastecimiento. Esto supone que al cabo del año la capital abulense se 'bebe' más de 7,2 millones de litros de agua. Sin embargo, y pese al volumen de estas cifras, lo cierto es que el consumo de agua en la ciudad de Ávila es ligeramente inferior a la media nacional, que en 2023 el INE situaba en 132 litros por habitante y día.   

Aunque es cierto que apenas hay grandes variaciones, el consumo de agua en la ciudad con respecto a años anteriores ha experimentado un ligero aumento teniendo en cuenta que en 2019 los abulenses consumían una media de 122 litros de agua al día y un año después, 124, mientras que en 2021 la demanda se situó en 121 litros por abulense y día. 

Es el verano, lo que comprende desde junio a septiembre, la época del año en la que más agua consumen los abulenses, siendo julio el mes en el que en la capital abulense se registran los mayores consumos en los que a abastecimiento respecta. 

En lo que a tipo de usos se refiere, y según la información facilitada por el Ayuntamiento de Ávila, en el caso de la capital abulense son los hogares los que más abren el grifo. De hecho, de la demanda de agua total el 69 por ciento del consumo es de uso doméstico. La industria es el segundo usuario que más agua consume en Ávila, en concreto el 23 por ciento del agua demandada en la ciudad, mientras que a otros usos se destina el 8 por ciento del  consumo. 

El precio medio del recibo de agua para uso doméstico es de 35,47 euros al trimestre, lo que no incluye el IVA, que en este caso es del 10 por ciento. Ávila es, de hecho, la sexta capital de provincia del país con las tarifas de agua más económicas, según un estudio de la Organización de Consumidores.

estudio de precios. Así, la OCU estima que la factura anual para 175 m3, lo que viene siendo el consumo medio de un hogar de 3 o 4 personas, sería en Ávila de 199 euros.

Solo en Soria, Melilla, Orense, Palencia y Guadalajara, que es la capital de provincia donde menos cuesta abrir el grifo (con un gasto medio de 164 euros al año), las tarifas de abastecimiento son más económicas que en Ávila. Por contra, la ciudad donde más caro resulta darse una ducha o fregar los platos es Barcelona, lo que no es extraño tampoco teniendo en cuenta no solo el volumen de agua que demanda una población tan amplia y el que hace el sector turístico sino los problemas de sequía que la Ciudad Condal viene arrastrando durante los últimos años. Aquí, según la OCU, la factura sube a 520 euros para un consumo anual de 175 m3 en un hogar medio. En esa lista de capitales de provincia donde hay que mirar bien cada gota también están Murcia, Alicante, Palma, Huelva, Lérida, Tarragona y Cádiz.  Y es que las dificultades de abastecimiento justifican que las ciudades de la cuenca mediterránea cobren precios más altos por el suministro.