Bailar aporta bienestar tanto físico como emocional. Ayuda a encontrarnos mejor, a tener más agilidad, a conocer más nuestro cuerpo y mejora nuestra salud mental. Pero no solo eso, la danza relaja ya que «reduce los niveles de estrés y aumenta la producción de serotonina, lo que nos hace sentir felicidad». Además, el baile nos ayuda a liberar miedos, complejos y vergüenzas y nos hace conectar con los demás «más allá de las palabras, a niveles kinestésicos, lo que genera una comunicación y conexión bastante más profunda». Éstas son solo algunas de las ventajas que la danza aporta, como apunta la artista y pedagoga Elena López Nieto, fundadora de Move Arte para todos, iniciativa que promueve y difunde las artes escénicas a través de talleres de danza-teatro ?y creaciones participativas.
Dar a conocer los beneficios del baile entre los más jóvenes (y los que no lo son tanto) es el objetivo con el Elena, a través de MOVE y en colaboración con el AMPA del IES Isabel de Castilla de la capital abulense, imparte todos los viernes (de 18,00 a 19,30 horas) talleres de danza, en este caso de contemporánea. Unos talleres que en un primer momento estaban dirigidos a alumnos de este centro educativo pero que están abiertos a cualquier persona que quiera realizar una actividad lúdico física que aporta «mucho bienestar».
No hace falta haber bailado nunca (ni edad límite para empezar), apunta Elena, que imparte estos talleres junto con Laura García, danza movimiento terapeuta, para participar en esta actividad ya que a diferencia de la danza clásica la contemporánea «es un lenguaje más abierto a todos los cuerpos». Eso sí, pese a que la danza contemporánea se sustenta en una forma de expresión «más libre», también requiere de técnica, una técnica que, apunta la fundadora de MOVE, contribuye a «mejorar nuestra conciencia corporal así como estimula nuestra memoria, tanto musical como rítmica y espacial».
Durante estos talleres, explica Elena, hay un calentamiento «desde la improvisación que nos ayuda a conectar con el cuerpo» pero también una parte técnica que ayuda a adquirir el rico lenguaje de la danza contemporánea con el fin de que sea «un entrenamiento físico que nos permita bailar mejor y no hacer siempre lo mismo».