VENÍA amenazando durante el día, como parece lo hará en buena parte de la Semana Santa, y finalmente confirmó los peores temores. La lluvia aguó la Procesión de los Estudiantes en la que iba a ser su segunda salida por las calles de Ávila, pero no logró apagar la Pasión estudiantil en este sábado previo al Domingo de Ramos. Las primeras estaciones de un Vía Crucis, en el interior de la iglesia de San Pedro, la salida al Mercado Grande con el paso de María Santísima Sede de la Sabiduría -la nueva imagen y principal novedad de la procesión- y el acto de consagración de la Universidad Católica de Ávila al Cristo de los Estudiantes, que tuvo que quedarse en la puerta del templo, fueron los actos con los que tuvieron que conformarse los penitentes y el numeroso público congregado en el corazón de Ávila para presenciar el segundo desfile del programa de la Junta de Semana Santa.

La expectación por la juventud de la procesión y las numerosas novedades que anunciaba fue satisfecha solo en parte. La culpa, la lluvia que chispeó durante la tarde y que, a medida que se acercaban las 21,15 horas, el momento para los estudiantes, parece que se hacía más intensa. Con el Mercado Grande convertido en un mar de paraguas dispuestos en dos filas y los profesionales de RTVCYL preparados para la retransmisión en directo de la cita por La 8 de Ávila, las puertas de San Pedro permanecían cerradas. La banda juvenil El Amarrado y la banda Murallas de Ávila, los encargados de poner el acompañamiento musical, esperaban pacientemente junto al templo, mientras los asistentes miraban continuamente al cielo y algunos cofrades salían a comprobar si el tiempo daba tregua.
 

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