Recién pasado el día universalmente conocido como de los enamorados, con sus mensajes de amor eterno, compra del mejor regalo o de unas flores que siempre funcionan, habría que preguntarse ¿qué queda de todo ello en el día a día de una pareja? Y otra cuestión. Recuerdo que hace décadas este día era como dirigido solo a los novios, pues es como si el enamoramiento fuera un virus que dura lo que el tiempo de noviazgo, al casarse se curaba y en la rutina de la convivencia no cabía el enamoramiento. O sea, los que lleven décadas con pareja estable no estarían enamorados. Tu pareja sería, como mucho y así lo decía Unamuno de su mujer, mi "costumbre".
¿Y qué es estar enamorado? Quizás sea más fácil responder a esta pregunta por inercia que examinarse y ver si se actúa en conciencia. Si estar enamorado es elegir para ella/él el mejor bocado, el mejor resguardo, la mejor palabra y sin esperar recompensa, solo porque amas, diríamos que sí. Si estar enamorado es no olvidarte del regalo por san Valentín, aunque hables y no escuches, exijas y no ofrezcas… Cada cual en esto se podría hacer innumerables listas y responderse.
Poetas, psicólogos, filósofos, han respondido a esto del enamoramiento según su campo de saber y siempre dentro del paradigma de que es algo que es cosa de dos, en cuanto que aceptamos el mito del amor que Platón trazara en El banquete, por el que somos seres incompletos y hemos de buscar nuestra otra mitad, o sea la media naranja que nos falta, para ser seres completos y felices. De esto deduciríamos que quien está soltero o no tiene pareja estable o vive formas alternativas y no heterosexuales de amar, no estaría nunca completo, o sea, no podría ser feliz en plenitud.
Y si el enamoramiento fuera solo –miro Google– "un estado emocional que se caracteriza por un conjunto de sensaciones positivas que se experimentan tanto a nivel mental como físico, que ocurre cuando alguien tiene una fuerte atracción hacia otra persona", vendría a equivaler a ese subidón que te da por un estado de euforia, como cuando gana tu equipo de fútbol o estás bajo los efectos del alcohol u otras drogas. No sirve esta definición.
¿Y la relación entre el amor y el enamoramiento? También don Google tiene su respuesta: "El amor aparece cuando conoces a una persona profundamente, cuando la quieres con sus cosas buenas y sus cosas malas; en cambio, el enamoramiento es el estado inicial, la atracción, las ganas de conocer más a una persona." También este señor te dará respuesta si lo que quieres saber es si lo que sientes es amor o enamoramiento. En fin, todo muy reglado, muy preciso para que no indagues por ti mismo qué demonio es esto del amor y del enamoramiento.
Es tiempo de revisar tópicos sobre el enamoramiento y el amor. Son fuerzas enormes, descomunales cuando se ponen en marcha, pero hemos de aceptar que el espectro del enamoramiento y del amor es mucho más amplio que el campo de la sola relación entre dos. Hay quien puede estar enamorado del hecho de vivir. O de la naturaleza. O de Dios. O de los demás. Y amar en profundidad por ello y vivir un enamoramiento o un amor más altos que el amor a dos. No creo que Teresa de Ávila tuviera menos capacidad y fuerza de enamoramiento que Julieta de Verona
No necesitamos excusas de un día para el amor, celebrémosle y recordemos que quizá sea la emoción más poderosa que las personas podemos sentir. "La causa de amar es amar; el fruto de amar es amar", como dejó escrito otro gran amante y enamorado, Bernardo de Claraval.
Foto: Ana Jiménez (@ginger_ajm)