Cisla acoge una velada de observación astral

Adrián Ruiz Pericacho
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La Federación Gallega de Astronomía y de Radioastronomía desarrolla una actividad de observación del cielo nocturno en el municipio abulense el pasado 16 de agosto

Cisla acoge una velada de observación astral

Cada vez son más las personas que se interesan por el turismo astrológico y la observación lunar. Un movimiento en auge y con un gran crecimiento en los últimos tiempos. Es por ello que no sorprende que en el municipio abulense de Cisla se reunieran más de 100 personas el pasado viernes 16 de agosto para observar los diferentes astros y pasar una velada en compañía con la excusa de la astrología. La iniciativa estuvo promovida por la Federación Gallega de Astronomía y Radioastronomía (FeGAR), que contó con la colaboración y la aprobación del alcalde, Luis Alberto Martín. 

La observación estuvo dirigida por  Marta Pérez-Gómez y Jesús Pérez, ambos monitores con certificación Starlight y miembros de dicha federación, así como de la Asociación Astronómica del Faro de Avión, en Pontevedra.

Los participantes en la quedada se vieron compensados con la observación de una luna casi llena durante prácticamente la totalidad de la observación. Además, pudieron apreciar también otros cuerpos celestes como el planeta Saturno o Antares, una estrella gigante roja de la constelación de Escorpio. Los más valientes frente al frescor de las noches abulenses pudieron ver también Júpiter, Marte y diferentes cúmulos globulares como el globular cerrado M13, estrellas dobles o triples, la Galaxia de Andrómeda o las Pléyades situadas en la constelación de  Tauro. 

La observación contó con el mejor telescopio portátil que se fabrica hoy en día en el mundo junto con los mejores prismáticos de fabricación japonesa del mundo.  Marta Pérez-Gómez trasladó en nombre de la Federación Gallega de Astronomía y Radioastronomía el agradecimiento a  «Luis Alberto Martín, alcalde de Cisla, junto a todos los vecinos del pueblo por darnos la oportunidad de transmitirles un poquito de lo que hay allí arriba y acogernos con tanto cariño y afecto».