Arte abulense en la Frieze Sculpture de Londres

D. Casillas
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Albano Hernández es uno de los 27 artistas extranjeros invitados a participar en la edición 2024 de la gran feria inglesa que abrió ayer sus puertas, en la cual hasta ahora solamente habían participado tres españoles: Miró, Plensa y Barceló

Arte abulense en la Frieze Sculpture de Londres

La Frieze Sculpture de Londres, una de las ferias de arte contemporáneo más importantes de cuantas se celebran en todo el mundo –participan alrededor de 150 galerías de arte de todos los continentes y a lo meramente expositivo se suman programas paralelos de actividades de promoción, formación y difusión–, ha elegido este año al abulense Albano Hernández como uno de los muy pocos artistas internacionales invitados a esta cita, en la que no son más que 27 los 'foráneos' seleccionados por la calidad y la originalidad de su obra.

Albano, que ya el pasado mes de junio tuvo el honor de ser invitado a exponer una de sus obras en la Summer Exhibition de la Royal Academy –un evento anual que se lleva celebrando desde 1769 y que constituye la exposición más grande y popular del Reino Unido–, toma de esa manera en la Frieze Sculpture de Londres el relevo de otros grandes artistas españoles como Plensa y Barceló.

Para esta gran exposición, que abre sus puertas entre los días 17 de septiembre y 27 de octubre, el artista abulense ha presenta la obra titulada The Shadow, una idea que materializa a través de una sombra, pintada en el césped del mítico Regent's Park, que «desborda géneros y técnicas, emergiendo como un híbrido de escultura y pintura, que evidencia la conciencia ecológica del autor y su compromiso con el movimiento residuo cero», según explican desde la organización de la Frieze Sculpture.

Con esta obra, que el propio artista considera que «desde el punto de vista artístico se cuenta entre lo más relevante o prestigioso que he realizado hasta el momento», Albano explica que ha creado «una escultura con ecos lúdicos en los jardines ingleses, que no se eleva sobre la superficie ni la perfora, sino que, ahondando en lo conceptual, privilegia una mirada mítica y mística».

Para la ejecución de la pieza, coherente con esa idea del ecologismo que la alienta, utiliza material no tóxico para fijar en el césped la sombra del árbol liquidámbar (Liquidambar styraciflua), especie documentada y traída a Europa por Francisco Hernández de Toledo en el s. XVI, bajo el reinado de Felipe II, detalle éste que da un pequeño protagonismo español más a la propuesta artística.

naturaleza y símbolo. En lo que se refiere al significado de la obra, añade, «su proceso conceptual destaca los protagonistas no humanos del jardín inglés», y además «establece asociaciones de ideas entre lo natural y lo simbólico, resaltando la relevancia de las sombras en la Historia del Arte –desde el mito de la caverna platónica– que vertebran este trabajo en clave poética, respetando al medioambiente, haciendo dialogar luces y sombras, ilusión y realidad, materiales orgánicos e industriales».

De acuerdo con lo que afirma Lucian Blaga en Piedras del tiempo, que «es verdad que las sombras se parecen a la oscuridad, pero son hijas de la luz», los organizadores de la Frieze Sculpture defienden que «este The Shadow expresa un mensaje de luz por medio de su sombra verde, sobre otra edad del verde, marca de la obra albaniana». Es decir, añaden, que esta obra está tocada por «varios guiños autobiográficos –¡el verdalbano!– y poniendo de manifiesto su compromiso con la naturaleza, implicándola en el arte, exhibiendo la esplendidez de su presente y buenos augurios para su futuro». 

Con más de veinte ediciones a sus espaldas, esta feria se ha consolidado como una de las citas imprescindibles para los coleccionistas internacionales, convirtiendo a la capital británica en el epicentro del arte global durante el arranque de temporada. Es una fecha marcada en rojo en el programa expositivo de las galerías, en la que las casas de subastas presentan sus mejores lotes con eventos y ferias satélites, y no es nada fácil destacar entre todo ese bullicio en el que hay tantos participantes, dificultad que Albano Hernández ha superado con el aval de su excelente hacer, convirtiéndose en el cuarto artista español seleccionado para Frieze Sculpture, tras Joan Miró (2013), Jaume Plensa (2013, 2014, 2017 y 2019), y Miquel Barceló (2017).