Cuando el fútbol era de barrio, de plaza y patio de colegio, cuando se decía aquello del 'no vale a punterón' y todos teníamos un amigo que era un 'chupón', cuando el fútbol simplemente se jugaba y no se 'enseñaba'... En aquel fútbol un nombre, Juan Jesús Herraéz, Juan 'El Cartero', uno de tantos, de muchos que le dedicaron su tiempo y su vida –34 años– a aquellos chavales que crecieron viendo a VanBasten, Gullit, Völler, Butragueño... Qué mítico. Como lo era el ADE, la Asociación de Diabéticos Españoles - Ávila, conocida después comoZona Norte, el equipo del Seminario, de la Cacharra, de la Plaza de San Francisco, donde comenzaron teniendo la sede, «la tienda de nuestro amigo Rafa.Aquello era como una familia. Allí teníamos hasta lo balones». Uno de esos clubes de los que quedan pocos, de barrio, como el fútbol de entonces, donde disfrutó Juan 'El Cartero'. Le metieron el gusanillo unos conocidos. «Empezamos a moverlo todo». Un alevín, un infantil y un cadete. No había más por aquel entonces. Poco después «formaríamos un juvenil». Poco a poco. «Estoy muy contento de haber participado en todo esto. No ha sido fácil». Muchas trabas, muchos inconvenientes, pero aún así «estoy muy contento». Aquello «era fútbol de barrio pero de mucha amistad, de amigos. Entonces no importaba si se jugaba mucho o poco. Ahora es otro tema. Todo se mira mucho».
De profesión, cartero. «38 años en el gremio». De ahí el 'apodo' con el que se le conocía en los banquillos, a los que llegó por amistad. «En aquella época no teníamos las facilidades que tienen ahora los chavales. Yo estudiaba, mis padres eran de un pueblo... Ahora no les faltan de nada». Había jugado al fútbol, «me gustaba mucho, pero ni tenía título ni nada. No lo teníamos nadie». En aquella época era una cuestión de vocación, no por el deporte o el fútbol sino por hacer algo con los chavales. «Veías fútbol, cogías los conceptos y los transmitía a los chicos». En aquellos años se jugaba a un buen nivel. «En la Zona tuvimos jugadores muy buenos». No es sólo es hablar de Rubén Peña, al que tuvo bajo sus órdenes en el Regional Juvenil, un equipo con el que lograron ascender a la Liga Nacional Juvenil –junto a Santi 'El Barbas' y Pedro Hoyos– sino de chicos como Piru, Josito, Lastras, Nayel, Parra, Manu, Luján, David,José Carlos, Ruba... «Había muchos chavales que jugaban muy bien. Los ascensos se consiguieron porque había buen material». Para llegar a todo ello hubo «que trabajarlo mucho». Nacieron como un equipo del barrio y hasta cierto punto lo siguen siendo, compitiendo «con estructuras deportivas potentes».
Una experiencia «muy positiva». Una vida. Del trabajo ya se jubiló, de todo esto del balón «aún no del todo». Aún hecha una mano en lo que puede. Porque el Manuel Sánchez Granado y el SantiagoSanz, El Seminario de toda la vida, han sido su 'casa'. Y por esa casa no es extraño verle con los nieto. Fútbol y nietos, qué buena combinación.