En pleno corazón de Ávila hay un rincón que acorta los algo más de 10.000 kilómetros que separan España y Argentina. Hablamos de la cafetería bar Buenos Aires que hace algo más de medio año abrió en el número 5 de la Plaza de Santa Teresa, en el lado de los soportales, el argentino Luis Alberto Jaimes, al que avala una larga trayectoria hostelera. No en vano, él y su familia estuvieron al frente durante varios años de un negocio hoslelero en Riofrío y de allí dieron el salto a un centro comercial de la capital abulense hasta que hace menos de un año decidieron trasladarse a la plaza del Mercado Grande.
Ayudado por su mujer, Mónica Bibiana, y por tres de sus hijos (Christián, Lumila y Anabel) Luis Alberto abrió el café bar Buenos Aires hace unos meses en la que sin duda es la plaza más popular de la capital abulense. Trabajadores de la zona, abulenses que acuden al centro a realizar comprar o distintas gestiones y también muchos turistas frecuentan el Buenos Aires que es, de hecho, el negocio más madrugador de la zona, tal y como asegura su dueño. Aquí, desde las 7,00 horas se ponen cafés, zumos y tostadas pero también bocatines variados y bollería para que tanto quienes acuden al trabajo como quienes quieren hacer turismo carguen pilas para afrontar la jornada. «Muchos turistas nos agradecen que estemos abiertos desde tan temprano», reconoce este empresario hostelero en cuyo bar pronto empiezan a ofrecerse pinchos de cocina entre los que no faltan callos, oreja, morro, albóndigas, pollo al ajillo, huevos revueltos, patatas revolconas o carne guisada, propuestas que varían cada día. «La vitrina de tapas está siempre llena», asegura este hostelero que conoce bien al cliente abulense y sabe que la hora del tapeo en Ávila es sagrada.
Además de cocina tradicional abulense entre las propuestas culinarias del bar Buenos Aires se cuelan, como no podía ser de otro modo teniendo en cuenta los orígenes de su dueño, también sabores argentinos en forma de empanadas, papas rellenas y, por supuesto, choripán que aquí se elabora al estilo tradicional, «con salsa chimichurri» incluida.
Y es que aparte del tapeo, el bar Buenos Aires también tiene una variada carta de platos combinados y raciones, siendo la carne uno de los productos mejor valorados por los clientes de este negocio. Chuletón con hueso, entrecot de ternera, milanesas al estilo argentino y también hamburguesas, con hasta cinco variedades y con la Buenos Aires como especial de la casa, son solo algunas de las propuestas que el cliente puede elegir para comer o cenar en este céntrico bar que no solo cuenta con comedor sino con una agradable terraza con vistas a la Muralla de Ávila.
«Estamos trabajando muy bien», asegura Luis Alberto al hablar de un negocio avalado por años de experiencia y profesionalidad y ubicado en un lugar privilegiado.