Ha convertido un partido socialdemócrata, con debate interno, en un partido en el que solo cabe el culto al "Líder", al "Mesías". La prueba incuestionable es lo que ha acontecido en el reciente último Congreso General del Partido, en el que en lugar de abordar temas de interés general, comenzando por el generado por la DANA, se han dedicado tan solo a "corear" a su Persona y también, por extensión, a su esposa, a la par que atacar a la "derecha".
Ha convertido la política nacional en un "muro" en el que los "buenos" son los que "impiden" que pueda llegar a gobernar la derecha. El único objetivo es que "no gobierne la derecha", y dentro de la "derecha" se encuentran todos aquellos que se oponen a sus políticas y a su persona.
La primera referencia que tenemos de su devenir público, conocida cuando ya ostentaba el Poder, fue la de que había plagiado su tesis, habiendo tenido colaboración de terceros para su redacción. Su habilidad para "captar" las voluntades es muy grande, sin duda.
Ostentando la Secretaría General del Partido, y cuando éste seguía siendo tal, esto es, cuando había debate interno y, sobre todo, políticos que no dependían de una sola Persona, sería "descabalgado" porque la Ejecutiva Nacional constató que sus posiciones iban a llevar al Partido y al País por malos derroteros.
No se resistió y preparó su vuelta a "toda costa". Para ello, se rodeó de una "guardia pretoriana" dispuesta a cualquier cosa: José Luís Ábalos, Marcos Cerdán y Koldo. Los tres están en el "ojo del huracán" judicial por presuntos delitos de corrupción y de otra naturaleza. ¿Son solo ellos? ¿No hay nadie más, arriba, abajo y a los lados? Miren, cuando unas personas comparten, día tras día, viajes, comidas, lugares de alojamiento, confidencialidades, se puede decir que tienen más similitud que con sus padres, hermanos, parejas y amigos de toda la vida. Difícil es creer que, ante tal "camaradería", lo hecho por Ábalos, Cerdán y Koldo, no sea, al menos, de su conocimiento.
Alcanzada, de nuevo, la Secretaría General llevó a cabo la "purga" de los que le habían echado, si bien no ha dudado de volver a echar mano de aquellos que estuvieran dispuestos a plegarse a su voluntad. Por supuesto, todos los que son y todos los que están en los cargos del Partido y en las institucionales, en cualquier ámbito, saben que o están con él, o no pueden estar.
Para llegar al Poder, y permanecer en el mismo, no ha dudado en pactar con quien fuere. Las más de las veces con pactos ocultos. Ahí están los pactos con Bildu, ERC y Junts, mayoritariamente. Las "contraprestaciones" concedidas para poder seguir gobernando, han conllevado y conllevarán un perjuicio de difícil, cuando no imposible, recuperación para la Nación y sus Instituciones, estableciendo, a su vez, una patente desigualdad entre los ciudadanos de una y otra parte del País.
Enfermiza es su obsesión por controlar todas las Instituciones, a través de personas afines y, muchas veces, sin escrúpulo alguno: Tribunal Constitucional. Fiscalía General, Banco de España, Indra, Sepi, etc. También por destruir a todo aquel que se le enfrente, políticamente, judicialmente, mediáticamente, etc.
Todo lo que concierne a su Persona, a su Partido, a sus dirigentes y afiliados, no puede sino generar "miedo", porque resulta acreditado que la Democracia y el Estado de Derecho se ha deteriorado de forma inimaginable desde que llegó al Poder.
Ahora bien, más "miedo" generan los millones de españoles que le votan y apoyan; que están dispuestos a aceptar y asumir todo aquello que haga; que se tiran a la "yugular" de cualquier que "ose criticarle", sin que quepa posibilidad de tener una conversación sosegada porque a la primera de cambio te descalifican y faltan al respeto tachándote de franquista, facha, carca, retrógrado, o expresiones similares; que les parece correcto que exista un "muro" que impida que pueda llegar a gobernar el centro-derecha, conducta a todas luces iliberal y antidemocrática; que nos les importe los pactos que ha hecho y sigue haciendo con partidos como Bildu, ERC y Junts, así como las medidas legales y de todo tipo que favorezcan a esos partidos, a sus votantes y a los territorios en los que radican, en contra del resto de ciudadanos del País. Sin semejante tropa de personas, lo que viene haciendo no podría generar tanto "miedo" y por lo tanto preocupación.
Claro que da "miedo", que existe honda inquietud y preocupación, por todo lo que está sucediendo, para qué negarlo. Hay que reconocerlo, a viva voz, porque una vez reconocido el "miedo" se puede actuar contra él. Los valientes, más aún los héroes, también han sentido el "miedo", es humano. Y también es humano superarlo. Animo a ello.