La Gerencia de Emergencias Sanitarias de la Junta de Castilla y León atendió en el primer semestre del año más de 10.500 llamadas de demanda de atención sanitaria urgente en la provincia de Ávila. Son el 7,4 de todas las registradas en la Comunidad, donde el balance de la actividad de emergencias sanitarias entre los meses de enero y junio se cira en algo más de 142.000 llamadas.
En comparación con el mismo periodo del año pasado hay crecimiento tanto en el ámbito provincial como regional, con un 8% más de llamadas gestionadas en Ávila y un 7% más en la Comunidad. En concreto, las 10.569 llamadas para requerir ayuda especializada desde algún municipio de la provincia supusieron 800 más que las recibidas en el primer semestre de 2023, mientras que en Castilla y León de las 132.745 del año pasado se pasó a las 142.180 de este año.
En el caso de la provincia las llamadas derivaron en la atención a 10.591 pacientes, un volumen que también superó al del año pasado, con un 8,7% más. La Gerencia de Emergencias Sanitarias tuvo que gestionar 193 accidentes de tráfico en las carreteras abulenses, 16 más que un año atrás, para dejar un aumento porcentual del 9%.
En Castilla y León la Gerencia de Emergencias Sanitarias de la Junta de Castilla y León atendió en los seis primeros meses del año 142.180 llamadas, para las que fue necesario movilizar un total de 150.880 recursos desde el Centro Coordinador de Urgencias (CCU) de Sacyl. Esta cifra se desagrega en 13.839 activaciones de ambulancias de soporte vital avanzado, 963 de los helicópteros de Sacyl, 4.600 de las ambulancias interhospitalarias, 713 de las Unidades de Enfermería de Emergencias, 15.504 de recursos de Atención Primaria y 115.110 de los vehículos de soporte vital básico. El resto de los recursos hasta la suma total se refiere a ambulancias de otras comunidades limítrofes o de otras instituciones (Cruz Roja o Protección Civil, por ejemplo).