Desde que el Ayuntamiento y la Diputación han aprobado sendas mociones demandando el fin del peaje de la AP-6 duermo mucho más tranquilo, que quieras que no esas durísimas e inesperadas peticiones desde la influyente provincia de Ávila inquietarán mucho a nuestros grandes próceres, los cuales se habrán puesto de inmediato nerviosos y manos a la obra para revertir ya mismo ese impuesto revolucionario que nos ata y nos mata.
Cuando soliciten que se construya la autovía Ávila-Maqueda, que se celebre la primera exposición del Prado en los Águila y que el sol comience a salir por Ávila en vez de por Anquetera, el futuro de esta provincia estará garantizado quizás no para las próximas décadas pero sí al menos para las próximas horas.
¿No son de sobra conscientes en Ayto y Dipu de que sus 'hermanos mayores' dejaron hace unos años atada y bien atada la eternización de ese sucio castigo del peaje para los abulenses cuando en justicia tocaba ponerle fin… y que ahí no hay posibilidad ninguna de amnistía? Pedir ahora solemnemente que se revierta el chantaje sirve de tan poco como demandar que llueva o que nos suban el sueldo a todos los abulenses por ser esta tierra de mal pagar, ni siquiera sirve para lavar la conciencia de quienes lo hicieron tan mal y saben que lo hicieron así de mal, vendiéndose al oro de moscú de unos intereses particulares que dejaron que primaran con mofa por encima de los generales.
Debatir en los plenos de estas dos instituciones sobre esta nueva forma del sexo de los ángeles es pérdida de tiempo, y de nada sirve el tiempo perdido en gestos que se agotan en sí mismos. Problemas tiene de sobra esta provincia para andar dando vueltas a una noria que no saca ni gota de agua, y que si no la saca es porque secaron el pozo a sabiendas de que así lo hacían.
Lo mismo lo que hay que hacer, en vez de mociones sin emoción que ya no sirven ni de cara a la galería cercana, y demostrado que lo único eficaz en este país no es tener razón sino trabajar el chantaje y demás malas artes, es llamar de verdad la atención y puigdemontar (coaccionar) al Gobierno, pero como no tenemos mafia para llevar a buen puerto ese extremo lo mismo hay que conformarse con dejar un coche oficial caduco averiado en el túnel de Guadarrama, esperando a que venga la grúa a por él, que seguro que eso sirve de mucho más.