Toda persona está sometida en todo momento a un proceso de socialización más o menos intenso, se denominan agentes de socialización. Los más importantes, las familias los amigos…Como todo lo humano, la familia es una organización con "defectos reales", sin embargo, si la humanidad no se hubiera organizado en familias, tampoco hubiera podido organizarse en Naciones. Naciones Unidas declaro en (mil novecientos noventa y cuatro). Año Internacional de la Familia. Se pretendía recordar algo casi evidente: que la familia no es una mera institución biológica destinada a trasmitir y conservar la vida, es mucho más, Chesterton en un escrito decía que la familia incluye fiesta, justicia, solidaridad, educación, libertad, descanso, amor, el hombre es un ser familiar, precisamente porque nace necesitado.
Si reflexionamos sobre la necesidad de fiesta, esta fue dada por revelación para elevar el espíritu, así como para descansar el cuerpo, permitiendo también canalizar las emociones como la alegría, pero también la tristeza.
Aremos referencia al presente. Familia y Navidad, fiesta cristiana que conmemora el nacimiento de Jesucristo, pero a pesar de su origen religioso, esta fiesta, es comúnmente celebrada incluso por los ateos como una fecha dedicada a reunirse en familia, y trasladar sentimientos, y también resentimientos, que por un tiempo no han sido expresado.
Como hemos descrito al principio la familia es una organización con defectos reales, que precisamente en la Navidad toman la practica de lo incomodo, de la no tolerancia, sin darnos cuenta que dicha fiesta no es para celebrarnos, el sentido de la Navidad, es soñar con la esperanza, como un valor humano, que debe proyectarnos a un futuro, y a dar gracias, desde la humildad del pesebre, donde nació el querido y deseado.
El verbo entero del Padre, que, con su amor enlazado, en su eterna eternidad es de abetorno engendrado. Pero poco se recuerda el significado de esta fecha veinticuatro de diciembre escogida por la Iglesia, para celebrar la festividad de su nacimiento.
Hoy la sociedad de consumo nos arrastra a otros usos y costumbres, regalos, viajes, fiesta, brillos… pero quedan las familias que aún con sus grandes ausencias, y los defectos reales familiares, sigue la tradición. El amor a través de ese olor en la cocina, los buenos leños en la chimenea, la casa llena, los abrazos etc. Pero estas navidades, a muchos de nuestros semejantes, les faltara su casa, y todo lo que conlleva la armonía de un hogar. Siguen en el desamparo, perdieron todo lo material, y lo más doloroso, a sus seres queridos. Mientras, muchos gobernantes se hundirán en la mentira. Estas Navidades más que otros años, no habrá igualdad. Solo tienen el derecho a la esperanza.