Mientras la Zona de Bajas Emisiones va tomando forma, y se empiezan a conocer más detalles de lo que supondrá su implantación en la ciudad de Ávila, las obras que se desarrollan en un buen número de espacios del centro se continúan desarrollando, generando en no pocas ocasiones un gran malestar por una situación que se prolonga ya bastante en el tiempo. Un 'mal necesario', éste de las obras, al que hay que recurrir, pese a las molestias, cuando se quiere reparar lo que está en mal estado, renovar lo que se ha quedado obsoleto o, simplemente, dar un lavado de cara para aportar una nueva imagen a ese entorno. Ambas situaciones, la implantación de la Zona de Bajas Emisiones y el desarrollo de las obras, discurren de forma paralela, pues uno de los objetivos fundamentales que se persiguen  es que ganen protagonismo los peatones en ese casco histórico y su entorno, pero en ese avance paralelo hay un eje que es esencial acometer y al que, de momento, no se le está dando respuesta, y es el de la generación de plazas de aparcamiento. 
Esas obras están eliminando muchos espacios para el estacionamiento, hasta el punto de que calles que contaban con decenas de plazas, caso de la calle El Tostado, quedarán reducidas a la mínima expresión, como ya ocurrió también en la plaza Fuente el Sol, por citar dos ejemplos muy palpables. Por eso urge que se empiece a dar respuesta a esas necesidades de aparcamiento, para facilitar el acceso a esa zona a los ciudadanos que necesitan desplazarse en vehículo.
Sea como fuere, esa reordenación urbanística que se está acometiendo va a necesitar de unas buenas dosis de concienciación y de educación para cambiar nuestros hábitos a la hora de desplazarnos, y eso también exige que se implanten novedades en el transporte urbano, que hagan atractivo el uso del transporte urbano en detrimento del vehículo particular. Eso facilitaría mucho ese nuevo escenario de la movilidad al que nos enfrentamos los abulenses. 
Muchos frentes abiertos, que necesitan respuesta en un corto espacio de tiempo, pues el 2025 está a la vuelta de la esquina. Yes que los abulenses necesitan que salir a la calle cada mañana no se convierta en una auténtica aventura, día sí y día también, para llegar a tu punto de destino.