Nuestra ciudad y sus gobernantes ¿nos sorprenden?, «o me sorprenden», dan prioridad a ciertos espacios críticos para cada momento, como si el conjunto de nuestra ciudad se dividiera, según el momento y situación. En algunos paseos la primavera ha llegado en Ávila, en otras zonas la maleza y el abandono están presentes. Pero a quiénes tratan de engañar. Hay zonas en que los turistas ni se pasean, no hay monumentos, ni restaurantes, etc. Pero sí estamos los ciudadanos paseando a diario por el abandono. Sin embargo, también como ciudadanos tenemos nuestra responsabilidad en que nuestra ciudad sea el reflejo de una buena dirección en igualdad.
Qué me produce a mí la estación de autobuses actual, depresión, irresponsabilidad, en alguna ocasión ni está en su puesto el señor para dar información, y no digamos para sacar un billete personalizado, con un horario vergonzoso. Creo que lo único que tiene vida, aparte de una empresa de transportes ya conocida por todos en Ávila, es el gimnasio, las voces del entrenador es algo en medio del deprimente ambiente que sientes que en el edificio hay gente. Revisen, revisen, y vean cuántas ventanillas dan servicio. Quién se ocupa de esto, nuestros gobernantes, todos de Ávila, no viajan en el autobús. Así como nuestra estación de tren, con sus carencias de horarios flexibles, tiene mucha más vida con la alegría del tránsito turístico, la estación de autobuses no llega ni al aprobado. 
   Creo que no estamos acostumbrados a ir a los plenos del Ayuntamiento, dado que sería algo normal, y me culpo por ello, por lo menos a la hora de protestar me sentiría mejor. No para criticar al político gobernante en este momento, o a la oposición, sino para aportar, aunque no se tuviera en cuenta. Pero ahí estaría la voz del ciudadano. En los plenos es donde se decide dónde poner ciertas esculturas de simbolismo en nuestra ciudad, en algunas ocasiones fuera de lugar. Hay una especie de representar ciertos acontecimientos, y no lo intelectual, tremenda, aparte de nuestra Santa Teresa no hay interés. Sin embargo, tenemos un bonito paseo como es el Rastro que podría albergar en línea muchos Intelectuales Ilustres de nuestra historia; sin embargo, hay que buscar esos mismos personajes ilustres por los rincones. Sé que hay guías de turismo que lo ejercen muy bien, pero la ciudad de Ávila por ella misma también se merece aparte de su Muralla Patrimonio de la Humanidad, declarada por la Unesco, más paisajes para poner las miradas.  
   Y qué decir de la pregunta constante que nos hacen los visitantes, «qué se va hacer con la estación de autobuses antigua». La invención seguro que no coincidirá con la especulación, la respuesta es fácil, de momento no hay dinero, de qué dinero nos hablan, del nuestro, o del de ellos. Será mejor confiar porque es muy difícil y doloroso aceptar la verdad.