Dicen que don Pedro es "franco",
y más parece un insulto.
Y si otros, además, dicen
que también él es "maduro",
son dos insultos terribles,
obscenos e inoportunos.
¡Decir que don Pedro es Franco
es decir con disimulo
que Pedro es un dictador
y yo de eso no lo acuso!
Mas yo no quiero insultarlo,
y en la herida más no hurgo.
Así que doy la palabra
a Pedro I el Mustio,
para que aquí se defienda
de esos descarados bulos
que de él dicen las derechas,
don Fe y ¡Joo! y doña Yuso.
Él mismo lo reconoce
y lo afirma sin tapujos:
–Españoles, YO soy franco,
y este adjetivo YO asumo,
y aunque digan que estoy verde,
YO soy, ay, también "maduro".
YO soy el dios progresista
–lo repito en mis discursos–
y os prometo con franqueza
con un sí fuerte y rotundo,
que a mí me quitáis el sueño.
YO por todos me preocupo,
y espero seguir mandando
hasta el… ¡2031!
y afirmo, pues YO soy "franco",
–y lo digo bien seguro–
que en mi familia no tengo
ningún familiar corrupto;
cuando los jueces los citan
me causan graves disgustos;
por eso, de mi chistera,
saco leyes por un tubo,
–la última la "Ley Begoña"
que tengo ya casi a punto–.
Y que ninguno me diga
que quiero escurrir el bulto
si callo a los periodistas
y a los jueces, muy palurdos.
Y sigue, dale que dale,
largando desde su púlpito:
–Aunque muchos protesteis
y digais que YO os subo
los impuestos y os dejo
en pelotas, sin un duro,
y a Catalonia perdono
su ya polémico cupo,
YO no subiré la luz,
aunque todo siga oscuro.
YO siempre digo verdad,
no crean todos esos bulos
de los que están en el fango
bien metidos, hasta el cul…
Y os digo con franqueza
que soy franco y soy maduro.
Y soy humilde y muy guapo,
aunque os parezca un chulo
si desmiento las noticias
que me meten en chanchullos.
No me importa que unos jueces
me sigan dando por… cul…
o que llegan por centenas
los migrantes en cayucos,
que suba el pan y el aceite
y las porras y los churros
y la vivienda sea un sueño
imposible para muchos.
Lo importante es recordar
al dictador ya difunto,
porque no murió en la cama
–ese sí que es grande bulo–.
A Franco lo maté YO,
y llené a Hispania de júbilo.
YO traje la democracia,
–como es muy notorio y público,
según la Ley de Memoria
de la Historia, que refundo–.
YO al Paco desenterré
del sitio de Cuelgamuros
y lo enterré en otro sitio
mucho más hondo y profundo,
para que no se levante
y siga en el otro mundo
y ya no nos "dicte" más
ni nos dé más por el… bulo.
Habéis de darme las gracias,
aplauso y respeto sumo.
Gracias a mí os librasteis
de aquel gallego tozudo.
Y pues YO "dicto" tan bien,
y sin errores de bulto,
y por mi gran madurez
y franqueza, YO no dudo,
en afirmar, "francamente",
que "YO soy Franco y Maduro!