Nuestra Constitución vigente, de nuestro Estado Social y Democrático de Derecho, cuenta con la experiencia política, madurez y compromiso político y legal con la Constitución y leyes por acatar la ley y el respeto de la legalidad constitucional, y es de reconocer el valor acreditado de nuestra Constitución, con sus años de vigencia y madurez, recabando que la acción política vele por la sociedad, y esté al servicio de la nación; y seguimos comprobando que se mantiene y sigue con buena salud democrática, y en estado de servicio, y con fuerzas que la hacen seguir sumando días con buena regularidad y salud institucional, para seguir iluminando el camino para la convivencia; a pesar de de los intentos y maniobras por dar una lectura de la Ley fundamental, novedosa y a la carta, interesada por algunos "vates" en turno de mando y poder en plaza, y con la repercusión que puede tener en nuestro derecho y el respeto del pacto constituyente, y la madurez política que la nación española requiere para seguir acreditando su valor para la convivencia, y así sigue acreditando desde diciembre de 1978.
La luz de la razón española por la vida en democracia, y que la acción política debe fortalecer con sentido del Estado y del patrimonio político inolvidable, e indisponible consenso social y político para enriquecer la convivencia en nuestra nación y serlo de todos, debe seguir iluminando y tener presente por la acción política que es nuestra opción por la unidad y la paz de la nación; y que el compromiso mayoritario por la convivencia de los ciudadanos soberanos y sus opciones políticas recuerden cada día, a las cabezas políticas díscolas (aunque bien lo conocen), que la nación ha dicho mayoritariamente, y proclamado: 1.España se constituye en un Estado social y democrático de Derecho, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político. 2. La soberanía nacional reside en el pueblo español, del que emanan los poderes del Estado.3. La forma política del Estado español es la Monarquía parlamentaria.
Hemos decidido mayoritariamente que: La Constitución se fundamenta en la indisoluble unidad de la nación española, patria común e indivisible de todos los españoles, y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas.
Son puntualizaciones que deben respetar los representantes de la nación y con el poder de mando en turno de plaza, para no se olvide que el pacto social por la convivencia, y real derecho de llegar bien a fin de mes, en casa, barrio, pueblo, Comunidad y nación, exige que "el mando" se dedique a hacer la vida mejor para todos cumpliendo con las reglas: legales y sociales, para que nadie se quede en la cuneta, y el caminar todos en el respeto de la dignidad humana, en tiempos difíciles de migración hacia un mundo mejor.
La realidad social debe seguir contando días de convivencia, en paz, bajo la luz del pacto social, mayoritario de la nación española, por seguir recogiendo los frutos del consenso político del pacto constituyente que desea establecer la justicia, la libertad y la seguridad y promover el bien de cuantos la integran; garantizar la convivencia democrática dentro de la Constitución y de las leyes conforme a un orden económico y social justo, y Consolidar un Estado de Derecho que asegure el imperio de la ley como expresión de la voluntad popular. Repasen la Constitución para opinar y exigir el cumplimiento de derechos por los responsables en turno de mando y el imperio de la ley como expresión de la voluntad popular (lectura gratis en redes).
En las cosas de la vida cotidiana en un Estado constitucional, se debe contar con el respeto de la libertad de prensa y el valor de su información veraz y sin condicionamiento político que altere esta misión fundamental en una sociedad viva y amparada constitucionalmente. El Derecho, las leyes con que la soberanía de nuestra nación ha decido contar y tener, la legalidad, lo están para asegurar la justicia y derechos y obligaciones del pacto social constituyente de cada día, defensa de de nuestra soberanía, y disposición y dedicación de la acción política con fidelidad a la nación, y responsable en el cumpliendo del compromiso constitucional con la Soberanía Nacional, y de nuestra real presencia en nuestra Comunidad de Naciones democráticas. Sumen su aportación plural para enriquecer nuestra libertad plural de opinión. iEa!