El cine desde sus comienzos ha estado marcado por una dualidad eterna e intrínseca en la que su naturaleza de vehículo de entretenimiento ha convivido con su vertiente autoral. No en vano, el cine estuvo en su primer amanecer ligado a la magia circense, como un truco visual más puesto al alcance del público para epatar y levantar aplausos. Con la depuración de su técnica y su democratización llegaron los autores para encontrar en él un nuevo campo para expresarse, desarrollar sus reflexiones y exprimir al máximo las posibilidades de la narrativa cinematográfica para firmar obras de culto estableciendo diálogos con las artes clásicas, la filosofía o las vanguardias y movimientos de cada sociedad.
"Quién es quién" pertenece, desde su concepción, a ese cine que renuncia deliberadamente a perdurar en la memoria para unirse a la extensa galería de títulos que el cine en su concepto más comercial arma cada año para puro (y efímero) entretenimiento del público. Y en afinidad a esta naturaleza comercial corresponde recibirla. Porque es habitual en la crítica emergente (y a veces en la más veterana) someter estos productos a estériles análisis contaminados por el academicismo para destrozar la película. Y no es de recibo, porque en el terreno comercial una película funciona si es capaz de conectar con su target y brindar dos horas de entretenimiento. Y no hay más vuelta de hoja, ni hay más complicaciones. Rasgarse las vestiduras es no haber entendido nada.
Martín Cuervo firma el remake español de "La sense de la famille", estrenada en nuestro país en 2021 con el mismo título y distribuida también por DeAPlaneta, y pone en circulación una comedia ligera de alcance familiar y que coincide en carteleras con "Al otro barrio", otra comedia española remake del cine francés. Y aunque "Quién es quién" quizá no sea la mejor opción para un público adulto sí se posiciona como un eficiente pasatiempo para los más pequeños de la casa, que conforman el público objetivo de esta película.
Rodada en tiempo récord y con un guion que renuncia a cualquier profundidad, la película entrega a su reparto la llaves del éxito y confía plenamente en Kira Miró y Salva Reina (pareja en la vida real desde que coincidieron en el rodaje de "Todos lo hacen", también dirigida por Martín Cuervo) para capitanear a una familia que amanece un buen día patas arriba por un mágico cambio de personalidades, que será el motor de la comedia. Una trama salpicada de cameos y en la que brilla con luz propia el trabajo (y desparpajo) de Sofía Otero, la actriz que con solo 8 años hizo historia levantando el Oso de Plata en Berlín por su papel en "20.000 especies de abejas".
Los niños son los que más disfrutarán de la historia, de sus situaciones y de sus soluciones, mientras que los más mayores pueden dedicar el tiempo de metraje a repasar mentalmente la lista de tareas pendientes o calcular cómo van a hacer frente a la cesta de la compra navideña estas fiestas. O mejor aún, valorar la opción de dejar a la chavalada en la sala mientras ellos se dedican a explorar el centro comercial con tranquilidad.