Día Internacional en memoria de las Víctimas del Holocausto, designado por las Naciones Unidas para marcar el aniversario de la Liberación el 27 de enero de 1945 de Auschwitz, el mayor campo de exterminio nazi. Ochenta años "sin olvido". El Holocausto judío en Europa, 1939-1945.
El porcentaje de muertos judíos al terminar la Segunda Guerra Mundial en relación con la población existente al inicio de las hostilidades. Unos seis millones de judíos (alrededor de dos tercios de la población judía mundial de la época) fueron exterminados. En algunos casos desaparecieron comunidades enteras. Se considera que existió un plan calculado de antemano, destinado desde el principio a dar muerte a todos los judíos que estuviesen en la órbita del Tercer Reich.
El plan habría sido esbozado por Hitler desde muchos años antes, algunos historiadores hacen mención a comentarios en privado que hizo Hitler, en relación a la matanza masiva de judíos. Públicamente, la única declaración al respecto del partido nazi se encuentra en el programa del partido, adoptado en febrero de 1920, allí se reclamaban leyes antijudías, que les anulara la ciudadanía, y les impidiera votar o inmigrar, y expulsar a los judíos llegados con posterioridad a 1914 y se comprometía a castigar con pena de muerte ha "usureros y especuladores" etc. Por el contrario, cuando el partido nazi llegó al poder ninguno de los dirigentes del Tercer Reich tenía una idea clara de cómo actuar con respecto a los judíos.
La idea de la liquidación en masa se fue desarrollando sobre la marcha, y el asesinato en masa a partir de iniciativas individuales de funcionarios del partido, del gobierno y del ejército. Hitler era quien marcaba las pautas y era asimismo la autoridad final en cuanto a decidir el grado de brutalidad de la política racial, dejan claro también que tenía ideas.
El 27 de enero es ahora para nosotros un símbolo, un símbolo de la atrocidad que debemos y deberemos siempre tener en nuestras mentes y en nuestros corazones para evitar que la historia se repita. En la posguerra y en la década de 1950 no hubo una toma de conciencia del Holocausto. Los judíos eran considerados unas víctimas más de la Segunda Guerra Mundial, por lo que el Holocausto "está poco presente en el debate público, y los propios judíos no intentan introducirlo". Los sobrevivientes a menudo querían hablar, pero no se les escuchaba demasiado. Cuando se empieza a hablar en Occidente de la destrucción de los judíos de Europa es en la década de 1960 a raíz del proceso a Adolf Eichmann, entonces empieza a difundirse el término Holocausto, aunque éste no alcanzará a todas las capas de la población hasta la emisión en 1978 de la serie televisiva norteamericana Holocausto. La palabra Shoah, utilizada en Israel, no se popularizó en Occidente hasta la década de 1980. Está presente en los libros en las tremendas imágenes que, contribuyeron a que el Holocausto esté presente en la conciencia colectiva.
"El Holocausto, no puede explicarse, pero debe contarse".