Que el Real Ávila «había tenido» una deuda con Caja de Ávila por la solicitud de un préstamo y una línea de crédito, «lo sabíamos», pero que esa deuda siguiera existiendo, «no».De haberlo sabido «no nos hubiéramos metido en el club». Así lo reconocen fuentes del Real Ávila a Diario de Ávila en una semana en la que siguen las reacciones y las preguntas, que no son pocas, sobre la solicitud voluntaria de un concurso de acreedores ante el reciente conocimiento de una deuda de 857.738 euros, fruto del aval de un préstamo que anteriores dirigentes del Real Ávila solicitaron a Caja de Ávila y que ahora se reclama por parte de la sociedad luxemburguesa Orado Investments Sarl. Dicha sociedad adquirió la deuda encarnada a Bankia en un paquete mucho más amplio y en una fecha cercana aunque desconocida con detalle, y que ahora reclama a los avalistas , uno de los cuales, y según ha podido saber este periódico, habría puesto el caso en manos de sus abogados desde el pasado mes de noviembre.
Una situación «cuanto menos sorprendente, inesperada y sin sentido» confiesan en los pasillos del Adolfo Suárez, que reconocen la «complejidad» de todo este asunto.
Sorpresa porque desde la actual dirección del club encarnado se reafirman en asegurar su desconocimiento sobre la existencia de la deuda que ahora aflora. Al menos hasta el presente mes de septiembre, cuando empiezan a conocer algunos detalles. «De haber sabido que el club tenía una deuda de 800.000 euros no nos habríamos metido.Sabíamos que la hubo, pero durante la negociación nos dieron su palabra de que no existía».
«Cuando nosotros negociamos –recordemos que Gestión Deportiva Abulense adquirió por cerca de 3 euros un paquete de acciones cercano al 60% del accionariado final– se nos habla de que hubo una deuda pero, tanto de palabra como mediante tres informes de auditoría (2009, 2010 y 2011) se nos dijo que ya no existía» señalan y explican al tiempo que se deja claro que, al menos a ellos, no les consta la existencia de ningún documento o certificado de Caja de Ávila o Bankia, como algunas voces han llegado a apuntar, que señale que dicha deuda estuviera condonada o que ya no existiera. «Al menos nosotros no lo tenemos» apuntan, sin querer con ello afirmar que no pueda existir. Porque en estos momentos en el club dejan claro que «nos costaría mucho creer que en una auditoría se reflejara algo así si no existe un soporte documental que lo corroborase».
Es por eso que en todo este proceso su planteamiento es que «para nosotros esa deuda no existe, no se comunicó, y de existir hay que ver de quién es, quién se responsabiliza de ella, si el Real Ávila, los avalistas...» aseveran.
De lo que se está convencido en el Adolfo Suárez en estos momentos es que «no hay nada más transparente y legal» que el procedimiento que se ha iniciado para conocer la situación económica en la que se encuentra el club. «Es la única opción que teníamos, y si todos quieren, si la ciudad quiere, el club saldrá adelante, y todo esto habrá servido para limpiar el club» esperan en un mensaje de tranquilidad. Porque la confianza en que el Real Ávila sobrevivirá a este concurso de acreedores es plena. Lo que no está tan claro es el futuro de Gestión Deportiva Abulense S.L. en el Ávila. A partir de que un administrador concursal se haga cargo del club «habrá que hacerles ver que se pueden conseguir unos ingresos y que existe un plan viable a futuro». A partir de ese momento «será el momento de evaluarlo todo» y con ello su posible continuidad.
Queda todo así a la espera de que el proceso concursal avance. Un proceso con el que comprobar cuál es la deuda final del Real Ávila o la lista completa de acreedores, entre los que previsiblemente se encontrará El Tiemblo, equipo que mantiene un acuerdo de filialidad con el Ávila y desde el que aseguran no haberse satisfecho las partidas económicas correspondientes.