David Herrero Muñoz

El sacapuntas

David Herrero Muñoz


Ávila incomunicada

15/01/2025

 Uno de los asuntos más polémicos en nuestra provincia es el de las comunicaciones. Solo hay que coger el coche para desplazarse a Madrid, por cuestiones médicas, laborales, culturales… para darse cuenta de que, en la práctica, por el desproporcionado coste del peaje, hay una barrera económica que limita un necesario flujo de personas y mercancías. Algo que, como es lógico, influye negativamente en el desarrollo de nuestra tierra.
 Si pensamos en otras fórmulas para viajar, contemplamos cómo el transporte público está muy lejos de ofrecernos una alternativa digna a tener en cuenta, por mucho que recibamos directrices de la Unión Europea que inciden, con razón, constantemente, en la necesidad de cohesionar los territorios de una manera sostenible y equilibrada.
 Aunque Castilla y León no cuenta con una capital autonómica oficial, algo que compartimos con el País Vasco, Valladolid se ha adjudicado implícitamente este mérito al contar con las principales instituciones políticas y representativas como el Consejo de Gobierno o las Cortes. Por ello, un indicador significativo es el número de conexiones e infraestructuras que unen al resto de la Comunidad Autónoma con dicho municipio. Si desagregamos por modos de transporte, y haciendo un estudio comparado, por ejemplo, con la vecina Segovia, empezamos a notar las diferencias que nos sitúan en una posición secundaria, con un trato que roza la dejación.
 La capital del acueducto está conectada con Valladolid por autovía, algo que permite un desplazamiento cómodo y bastante seguro, mientras que para llegar desde Ávila, normalmente por Arévalo, lo debemos hacer en gran parte por carretera nacional, invirtiendo más tiempo e incrementándose el peligro de accidente.
 Si en lugar de coger el coche nos decantásemos por el bus, en Segovia tendríamos cerca de una decena de trayectos directos con Pucela, mientras que desde Ávila no contaríamos con ninguno, siendo la única capital de provincia de la región que sufre esta llamativa situación.
   Respecto a las conexiones ferroviarias, se puede viajar desde Segovia a Valladolid en diferentes tipos de tren, entre ellos el preciado AVE, en más de veinte trayectos con una media hora de duración. Desde Ávila tenemos menos de 10 trayectos doblando el tiempo de viaje.
  Si esto sucede con Valladolid, imagínense la situación de Ávila respecto al resto de capitales de provincia de la Comunidad Autónoma. Vivir de espaldas a los diferentes territorios de Castilla y León no es la mejor forma de construir identidad y, si no, pregúntenselo a la buena gente del Valle del Tiétar, que dependen de un convenio con Castilla-La Mancha para recibir asistencia sanitaria.
 Este contexto difícilmente va a cambiar mientras contemos con políticos que estén más pendientes de su sillón y su ego que de las necesidades de sus vecinos. Con esto no quiero decir que sean todos, pero sí muchos.